El diplomático Zhu Jingyang difundió una serie de interacciones para aclarar la postura de su país frente a la construcción de ese sistema de transporte.
El embajador de China en Colombia, Zhu Jingyang, calificó de «noticia falsa» la información difundida por varios medios sobre la supuesta negativa del presidente chino, Xi Jinping, de hablar con su par colombiano, Gustavo Petro, sobre la construcción del Metro de Bogotá.
La semana pasada, el mandatario colombiano informó que se reunirá con su homólogo el próximo 25 de octubre en Pekín.
Aunque no se ha conocido la agenda detallada de esa visita, Petro adelantó que entre los temas que se abordarían estaría el de ese sistema de transporte.
Tras esas declaraciones durante un evento presidencial en Bogotá –al que asistió la alcaldesa de esa ciudad, Claudia López, con quien Petro tiene diferencias sobre el proyecto del Metro–, El País publicó una información atribuida a «fuentes conocedoras de las conversaciones entre ambos Estados» en la que se afirmaba que el mandatario chino le había hecho saber en dos oportunidades a su homólogo que no hablarían del asunto.
Las publicaciones del embajador
El embajador chino compartió en su cuenta en la plataforma X varias reacciones a la difusión de esa información errónea, que se replicó en varios medios colombianos.
En una primera interacción, Zhu escribió: ¡Ojo: Esto es 100 % noticia falsa!».
Posteriormente, la Embajada de China en Colombia publicó el enlace a la nota del medio español y aseveró que ahí se originaba el bulo.
Horas después de esas interacciones, el embajador chino hizo otra publicación en sus redes para volver a rechazar la información falsa.
El mismo día de estas aclaratorias, la Procuraduría de Colombia informó que había abierto una indagatoria previa a la alcaldesa de Bogotá y a la senadora Angélica Lozano, para determinar si estaban relacionadas con el supuesto pago de coimas por parte del contratista que construye el Metro de esa ciudad.
La construcción del Metro de Bogotá ha estado cercada por un conflicto político que se ha intensificado en el último año.
Mientras que el mandatario considera que un tramo de la Línea 1 debería ser subterráneo, López ha dicho que no hay presupuesto para ello y que debería mantenerse aéreo.
