Cinco personas, incluyendo un menor de edad, fueron arrestadas por el homicidio del dueño de una lavandería en Brooklyn (NYC) a quien le robaron su cadena de oro. El crimen orquestado por un primo suyo dejó tres huérfanos.
Cinco personas, incluyendo un menor de edad, fueron arrestadas en relación con el homicidio de Money Perkins (37), baleado dentro de su lavandería en Brooklyn (NYC) cuando le robaron su cadena de oro valorada en $60,000 dólares, dejando tres huérfanos.
El homicidio ocurrió poco antes de las 6 p.m. del pasado 1 de diciembre en East Flatbush. Más de tres meses después, la policía de Nueva York anunció los arrestos de Ronnie Butler (46) -primo de la víctima-, Shaleek Riddick (19), Diante Stinson (20), Louis Mercado (48) y su hijastro de 16 años identificado como Zecharyah “Zoota” Slay, por Daily News. Los cinco enfrentan cargos que incluyen homicidio, conspiración para robar y posesión criminal de un arma.
No se trató de un robo casual, sino muy planificado. Según los fiscales, Perkins fue víctima de una disputa de años con su primo (Butler), quien al parecer recibió la ayuda de su amigo Mercado para reclutar un escuadrón de sicarios conectados con pandillas.
Según NYPD, Perkins estaba limpiando su lavandería cuando un grupo de hombres con sudaderas y capucha de invierno entró, exhibieron armas, lo derribaron al suelo y lo balearon para robarle la cadena de oro que llevaba en el cuello y que los ladrones se llevaron. El homicidio quedó captado en un video de vigilancia.
El pequeño empresario era esposo y padre de tres hijos: un adolescente de 17 años, una niña de 8 y un bebé de 2. Los líderes vecinales lamentaron su muerte, diciendo que era un defensor y un modelo a seguir para la generación más joven.
“Estamos hartos y cansados de esto. ¿Cuándo vamos a poner fin a la violencia armada sin sentido en la comunidad negra y de color?”, se preguntó entonces Natasha Christopher, coordinadora del grupo “Mothers for Safe Cities” (Madres por Ciudades Seguras).
Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.
Aunque el crimen ha bajado, la violencia armada sigue siendo constante en la ciudad de Nueva York, en calles, el transporte público, edificios y establecimientos comerciales. En lo poco que va del año, tres hombres han muerto baleados en el Metro.
Esta semana un joven de 29 años fue arrestado como sospechoso de balear fatalmente en la cabeza al empleado de una bodega en Brooklyn, en medio de una supuesta discusión por un cigarro. La semana pasada un niño de 13 años que regresaba a casa después de ver un partido de baloncesto de los Brooklyn Nets también murió baleado.
El domingo a un hispano le dispararon fatalmente afuera del edificio donde vivía con su madre en el Alto Manhattan, terminando abruptamente su sueño de unirse al ejército como su hermano.
En lo que va del año, hasta el 25 de febrero, 44 personas en toda la ciudad fueron víctimas de homicidios, una caída del 27% respecto al mismo período del año pasado, cuando hubo 60 casos, según las estadísticas de NYPD. Los tiroteos han disminuido en 2024 con 109 incidentes al 25 de febrero en comparación con 159 en el mismo lapso en 2023.