jueves 21 de noviembre de 2024 2:20 pm
Eddy Tolentino

Continúa la impunidad para un adolescente vinculado a bandas criminales en Nueva York

Un adolescente venezolano de 15 años, supuestamente asociado con el grupo delictivo Tren de Aragua, ha sido arrestado en al menos diez ocasiones durante este año en Nueva York, según informaron fuentes policiales al New York Post. A pesar de su extenso historial delictivo, el menor sigue en libertad y se le permite residir en refugios financiados por la ciudad, lo que ha suscitado la frustración de las autoridades.

La situación es preocupante, ya que el joven es parte de “Los Diablos de la 42”, una facción del Tren de Aragua compuesta por migrantes que se dedican a cometer robos a mano armada en zonas turísticas como Times Square. Las fuentes policiales advierten que este grupo ha estado atacando tanto a residentes como a turistas, lo que genera un ambiente de inseguridad en la ciudad.

El adolescente llegó a Estados Unidos en mayo de 2023, cruzando la frontera junto a su familia. Aunque fueron detenidos por agentes fronterizos, se les permitió continuar su camino a la espera de los procedimientos migratorios. Con la primera audiencia programada para el próximo mes, las autoridades intentan abordar el problema, pero se enfrentan a la legislación actual, que limita las opciones para juzgar a menores como este adolescente.

Entre los delitos más graves en los que se le ha implicado se encuentra un ataque a dos pasajeros en la línea 7 del metro de Queens, donde las víctimas fueron golpeadas. Menos de una semana después, fue arrestado por amenazar a tres personas con un cuchillo y posteriormente robó un teléfono en Central Park. A pesar de estos incidentes violentos, sigue en libertad, lo que plantea serias dudas sobre la efectividad del sistema de justicia y las políticas públicas actuales.

La frustración entre las fuerzas del orden es evidente, y un oficial comentó: “No hay forma de disuadirlo. Sigue tratando nuestra ciudad como si fuera su videojuego personal”. La situación ha llevado a un debate sobre la necesidad de revisar las políticas y leyes que afectan el tratamiento de los jóvenes delincuentes, especialmente en casos tan graves como este.

Por: Francisco Nuñez

franciscoeditordigital@gmail.com

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