domingo 24 de noviembre de 2024 3:22 pm
Eddy Tolentino

Jason Soto fue detenido en Pensilvania como sospechoso de haber baleado en la cabeza a otro hispano en un apartamento en El Bronx (NYC). La víctima en principio sobrevivió, pero murió tars agonizar tres días en el hospital.

Jason Soto fue detenido en Pensilvania como sospechoso de haber baleado en la cabeza a Phillip Martínez, quien fue hallado gravemente herido dentro de un apartamento en El Bronx (NYC) el mes pasado.

Los policías que respondieron a un informe de asalto dentro de un apartamento del primer piso en E. Mosholu Parkway South cerca de E. 204th St. en Jerome Park el 20 de agosto encontraron a la víctima de 36 años tirada en el suelo, con un disparo en la cabeza. Milagrosamente aún estaba vivo.

Los servicios de emergencias médicas lo llevaron rápidamente al Hospital St. Barnabas, donde murió a causa de sus heridas tres días después. Los investigadores identificaron rápidamente como sospechoso a Soto, de 44 años, pero había huido de la ciudad, por lo que NYPD envío un alerta a los estados vecinos.

Ninguno de los hombres vivía en el apartamento donde sucedió el crimen y no está claro el motivo ni si ambos se conocían, acotó Daily News.

Un día después del tiroteo Soto fue detenido en Bensalem (Pensilvania) a unas 90 millas de El Bronx, por una infracción de tránsito. Allí la policía lo retuvo hasta el jueves, cuando los detectives de órdenes judiciales de NYPD lo extraditaron a Nueva York y lo acusaron de homicidio.

Martínez vivía al otro lado de Mosholu Parkway, a unas cuatro cuadras de donde le dispararon. Soto residía en Camden (Nueva Jersey) y no tenía antecedentes de arrestos en la ciudad de Nueva York, dijo la policía.

En un caso similar, este fin de semana un inmigrante ecuatoriano de 33 años murió baleado en la cabeza durante un presunto robo afuera de una gasolinera cerca de su hogar en Brooklyn (NYC).

Previamente, la noche del jueves un traficante de marihuana fue encontrado muerto en un apartamento en Brooklyn donde se recuperaba de las heridas de bala que había sufrido en las piernas unos días antes.

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