jueves 21 de noviembre de 2024 3:02 pm
Eddy Tolentino

La misión rusa Luna-25 tuvo un final inesperado con un “aterrizaje forzoso en la Luna”, dejando tras de sí un cráter considerable.

La misión rusa Luna-25 concluyó recientemente con un aterrizaje forzoso en la Luna, creando inadvertidamente un importante cráter lunar.

La agencia espacial rusa, Roscosmos, confirmó que el viaje de Luna-25 llegó a un final abrupto cuando entró en una órbita incontrolada y posteriormente chocó con la Luna el 19 de agosto a las 11:57 UTC.

Este percance lunar dejó una marca indeleble (un cráter sustancial) en la superficie lunar.

Impulsado por la publicación de Roscosmos de la ubicación estimada del aterrizaje el 21 de agosto, la NASA inició una investigación utilizando su Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO).

A partir del 24 de agosto, el LRO capturó una secuencia de imágenes que mostraban el cráter recién formado, que mide aproximadamente 33 pies de diámetro. Este cráter se encuentra a lo largo del borde interior del cráter Pontécoulant G, a unas 248 millas del lugar de aterrizaje previsto para Luna-25.

“La imagen del ‘antes’ más reciente del área por parte de LRO fue capturada en junio de 2022 […]; por tanto, el cráter se formó algún tiempo después de esa fecha. Dado que este nuevo cráter está cerca del punto de impacto estimado de Luna 25, el equipo de LRO concluye que es probable que provenga de esa misión, en lugar de un impactador natural”, dijo la NASA en un comunicado.

Este descubrimiento se suma al catálogo de cráteres lunares, que actualmente asciende a 9,137 según la Unión Astronómica Internacional. Sin embargo, los datos del orbitador lunar Chang’e de China sugieren que el recuento real puede ser considerablemente mayor, llegando potencialmente a 130,001.

Los restos de Luna-25 se unen a una gran cantidad de escombros creados por humanos en la superficie de la Luna. Aproximadamente 200 toneladas de restos terrestres, incluidos restos de naves espaciales estrelladas, propulsores de cohetes desechados, desechos humanos, banderas, una Biblia e incluso pelotas de golf, comparten ahora espacio con este nuevo cráter lunar.

Yury Borisov, director de Roscosmos, proporcionó información sobre el accidente del Luna-25 y lo atribuyó a un mal funcionamiento del motor de maniobra de la sonda. Según se informa, el propulsor de la nave espacial se encendió durante 127 segundos en lugar de los 84 segundos previstos, lo que finalmente provocó el aterrizaje forzoso.

Abunda la especulación de que la misión Luna-25 se aceleró para superar a la misión Chandrayaan-3 de la India para aterrizar en el polo sur de la Luna. El aterrizaje sin tripulación de la India logró un éxito perfecto, lo que la convirtió en el primer país en lograr esta hazaña. En la carrera hacia el polo sur lunar, la apuesta de Rusia no dio el resultado deseado.

Este descubrimiento se suma al catálogo de cráteres lunares, que actualmente asciende a 9,137 según la Unión Astronómica Internacional. Sin embargo, los datos del orbitador lunar Chang’e de China sugieren que el recuento real puede ser considerablemente mayor, llegando potencialmente a 130,001.

Los restos de Luna-25 se unen a una gran cantidad de escombros creados por humanos en la superficie de la Luna. Aproximadamente 200 toneladas de restos terrestres, incluidos restos de naves espaciales estrelladas, propulsores de cohetes desechados, desechos humanos, banderas, una Biblia e incluso pelotas de golf, comparten ahora espacio con este nuevo cráter lunar.

Yury Borisov, director de Roscosmos, proporcionó información sobre el accidente del Luna-25 y lo atribuyó a un mal funcionamiento del motor de maniobra de la sonda. Según se informa, el propulsor de la nave espacial se encendió durante 127 segundos en lugar de los 84 segundos previstos, lo que finalmente provocó el aterrizaje forzoso.

Abunda la especulación de que la misión Luna-25 se aceleró para superar a la misión Chandrayaan-3 de la India para aterrizar en el polo sur de la Luna. El aterrizaje sin tripulación de la India logró un éxito perfecto, lo que la convirtió en el primer país en lograr esta hazaña. En la carrera hacia el polo sur lunar, la apuesta de Rusia no dio el resultado deseado.

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