Los nuevos AirPods Pro 2 han incorporado funciones de salud auditiva que incluyen pruebas de audiometría y la capacidad de usarse como audífonos, aunque con algunas limitaciones. Este avance refleja cómo los dispositivos electrónicos portátiles, como los auriculares, están comenzando a desempeñar un papel más activo en la monitorización y asistencia en la salud.
Concienciación, prevención y asistencia:
Apple ha lanzado lo que llama la primera “experiencia todo en uno de salud auditiva” con los nuevos AirPods Pro 2. Esta función incluye una prueba de audiometría para evaluar el estado de la audición, un sistema de cancelación de ruido para la prevención, y la capacidad de usar los auriculares como audífonos para quienes tengan problemas auditivos.
Pruebas auditivas y telemedicina:
Si bien los test auditivos online no son nuevos, la mejora en la tecnología de los auriculares ha permitido que estos exámenes tengan mayor precisión, aunque no reemplazan las pruebas clínicas estándar realizadas por audiólogos. Estas pruebas proporcionan una evaluación inicial y pueden ser útiles para indicar si es necesario acudir a un especialista.
AirPods como audífonos:
Los AirPods Pro 2 ahora pueden usarse como audífonos personalizados, ajustados según los resultados de la prueba de audición del usuario. Esta función, aunque útil, no es suficiente para todos los casos de pérdida auditiva, especialmente en los más graves, donde se necesitarían audífonos especializados.
Estándares médicos y limitaciones:
El uso de dispositivos como los AirPods o los relojes inteligentes para funciones médicas sigue evolucionando. Si bien algunos dispositivos ya cumplen con estándares regulatorios, como los relojes que pueden hacer electrocardiogramas, las evaluaciones médicas aún requieren la interpretación y dirección de profesionales sanitarios.
En resumen, aunque los AirPods Pro 2 representan un avance en la integración de la tecnología de consumo con la salud auditiva, todavía existen limitaciones y es importante contar con la orientación de especialistas en casos más serios.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com