sábado 28 de diciembre de 2024 9:50 pm
Eddy Tolentino

Nuevas pistas sobre la evolución terrestre en el Gran Cañón

Un análisis detallado de un conjunto de estratos sedimentarios conocido como el ‘Grupo Tonto’ del Gran Cañón ha revelado que la evolución de la Tierra durante el periodo Cámbrico fue significativamente más rápida de lo que se pensaba anteriormente. Este estudio, liderado por Carol Dehler de la Universidad de Utah y publicado en GSA Today, destaca el impacto de los cambios ambientales en los mares primitivos y cómo estos moldearon el surgimiento de la vida marina.

Un modelo más complejo del origen de los mares

La investigación utilizó el modelo McKee para reinterpretar la deposición de sedimentos del ‘Grupo Tonto’. Este modelo reveló que, aunque los mares iniciales de la Tierra se formaron lentamente, en este caso particular los cambios se dieron de manera más acelerada y con mayor complejidad. “Nuestro nuevo modelo muestra una mezcla de condiciones marinas y no marinas, intercaladas con discontinuidades o periodos donde no se depositaron sedimentos. Esto implica una tasa de evolución más dinámica de lo que se creía”, señaló Karl Karlstrom, coautor del estudio y profesor de la Universidad de Nuevo México.

Los estratos del ‘Grupo Tonto’ y la explosión cámbrica

Estos estratos sedimentarios, formados hace 500 millones de años, coinciden con la explosión cámbrica, un periodo clave en la historia de la vida en la Tierra cuando aparecieron los primeros animales con caparazones duros. Durante este tiempo, el nivel del mar aumentó drásticamente, inundando grandes áreas de los continentes. “El ‘Grupo Tonto’ sigue siendo una de las secciones del Cámbrico más completas del mundo, proporcionando una ventana única al pasado marino”, explicó Karlstrom.

El análisis también reveló que los trilobites, algunos de los primeros animales marinos conocidos, experimentaron ciclos rápidos de evolución y extinción, completando estos procesos en menos de un millón de años. Este descubrimiento desafía la noción tradicional de una evolución gradual y destaca la rapidez con la que las especies se adaptaron y desaparecieron en este periodo.

Condiciones extremas y su impacto en la biodiversidad

El entorno durante la formación del ‘Grupo Tonto’ estuvo marcado por fenómenos climáticos extremos, como tormentas tropicales intensas y fluctuaciones abruptas del nivel del mar. Estos eventos redistribuyeron sedimentos a gran escala, cubriendo áreas continentales enteras. La falta de vegetación terrestre y las altas temperaturas globales facilitaron la expansión de los ecosistemas marinos.

“A través de los 500 metros de sedimentos del ‘Grupo Tonto’ aprendemos sobre eventos catastróficos como tormentas tropicales más potentes que los huracanes actuales y su papel en la configuración de los mares”, señaló Dehler.

Avances en la datación y su relevancia científica

La precisión en la datación de estas capas se logró gracias al uso del sistema uranio-plomo, que permitió determinar con exactitud la edad de cada estrato y los cambios en la biodiversidad. Este enfoque no solo mejora nuestra comprensión del Cámbrico, sino que también arroja luz sobre los factores que impulsaron la rápida diversificación de la vida en la Tierra.

Con estos hallazgos, el ‘Grupo Tonto’ del Gran Cañón se reafirma como un tesoro geológico y paleontológico, proporcionando información clave sobre los primeros capítulos de la vida marina y los procesos que moldearon nuestro planeta.

Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com

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