Israel acusado de intensificar crisis humanitaria en Gaza con ataques y bloqueos
El gobierno de Gaza, liderado por Hamás, acusó a Israel de dirigir sus operaciones militares hacia la destrucción sistemática de la infraestructura humanitaria en la región. Según Hamás, al menos 728 agentes de seguridad, incluyendo guardias encargados de proteger los convoyes de ayuda, han sido asesinados desde el inicio del conflicto. Esta situación ha agravado la precariedad en el enclave, desatando saqueos masivos de suministros esenciales.
“La ocupación israelí actúa deliberadamente para crear un ambiente propicio para el saqueo de ayuda humanitaria, promoviendo el caos y privando a nuestro pueblo de asistencia vital,” señaló el gobierno gazatí en un comunicado. La declaración también denunció que las fuerzas israelíes han atacado con precisión a aquellos responsables de garantizar la llegada segura de los suministros a los almacenes.
Saqueos de convoyes humanitarios en aumento
El pasado domingo, saqueadores interceptaron un convoy del Programa Mundial de Alimentos (WFP) en el Corredor de Filadelfia, una ruta clave para la entrada de ayuda desde Egipto. El incidente ocurrió tras un bombardeo israelí que obligó a los conductores a detenerse. Según la ONU, este saqueo afectó a un tercio del convoy, aunque 43 camiones lograron entregar su carga. Este no es un caso aislado: el 12 de diciembre, 80 vehículos fueron asaltados en la misma zona.
Stéphanie Tremblay, portavoz adjunta de la secretaría general de la ONU, expresó desde Nueva York su preocupación por la creciente anarquía en Gaza, exacerbada por la destrucción de las fuerzas de seguridad palestinas a manos de Israel. “Los ataques israelíes han desmantelado la capacidad de protección local, lo que ha dejado a la población en una situación de vulnerabilidad extrema,” señaló Tremblay.
Impacto del bloqueo humanitario
Hamás también denunció que Israel utiliza el bloqueo como arma de guerra, permitiendo solo un flujo limitado de ayuda mientras niega sistemáticamente permisos a la mayoría de los convoyes de la ONU. “La ocupación busca perpetuar el hambre, especialmente entre niños, mujeres y personas desplazadas, y fomenta indirectamente la especulación de precios en los mercados locales,” afirmó la organización.
Por su parte, Mohamad Mustafa, primer ministro de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que gobierna en Cisjordania, enfatizó la necesidad de una coordinación más efectiva entre las agencias de socorro en Gaza. Desde Ramala, Mustafa instó a las organizaciones internacionales a tomar medidas para evitar los saqueos y garantizar una distribución equitativa de los recursos.
Crisis humanitaria en escalada
La ONU ha condenado repetidamente a Israel por la crisis humanitaria en Gaza, argumentando que su bloqueo y ataques contra la infraestructura civil contradicen su responsabilidad como potencia ocupante bajo el derecho internacional. Las limitaciones impuestas a la entrada de ayuda han intensificado una situación de hambre masiva, agravando las tensiones sociales y alimentando el surgimiento de bandas de saqueadores sin afiliación política.
En medio de esta devastación, los habitantes de Gaza enfrentan no solo los bombardeos constantes, sino también un futuro incierto marcado por el hambre, la inseguridad y la desesperación. La comunidad internacional sigue llamando al cese de hostilidades y al levantamiento del bloqueo, aunque las soluciones parecen cada vez más lejanas.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com
