jueves 21 de noviembre de 2024 7:23 am
Eddy Tolentino

Informe advierte impactos en educación, salud y vivienda bajo una posible segunda administración de Trump

Un informe publicado este miércoles por la oficina del Contralor de la Ciudad de Nueva York, liderada por Brad Lander, advierte sobre los posibles efectos negativos que podría tener una segunda administración de Donald Trump en sectores clave como la educación, salud, vivienda e infraestructura de la Gran Manzana. El análisis, basado en las acciones realizadas durante el primer mandato del expresidente, su campaña de 2024 y el plan conocido como Proyecto 2025, subraya amenazas significativas al presupuesto y la economía de la ciudad.

Amenazas al presupuesto y servicios esenciales

El informe destaca que las políticas promovidas por Trump podrían desfinanciar programas fundamentales. Las escuelas públicas, la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY) y los programas de educación infantil, que dependen de $3,500 millones anuales en fondos federales, podrían enfrentarse a recortes significativos. Además, se señala que esta financiación podría ser redirigida hacia vales educativos o cuentas de ahorro para la educación, debilitando aún más la educación pública.

En el ámbito de la vivienda, se proyecta una disminución en la producción de viviendas asequibles debido a la falta de apoyo federal y a un entorno económico menos favorable. Los hospitales públicos y los programas de atención infantil también estarían en riesgo, lo que afectaría directamente a las comunidades más vulnerables.

Políticas económicas y sociales preocupantes

El contralor Brad Lander también advirtió sobre un posible aumento de la inflación provocado por aranceles y políticas económicas restrictivas. Esto, combinado con una reducción en las inversiones en infraestructura y programas relacionados con el cambio climático, podría frenar el desarrollo de la ciudad.

En el ámbito social, el informe subraya retrocesos en derechos civiles, especialmente para comunidades LGBTQ+, inmigrantes y mujeres que buscan acceso a servicios de aborto. Estas medidas podrían poner en peligro la seguridad y el bienestar de miles de neoyorquinos.

La respuesta de la administración de Eric Adams

El alcalde Eric Adams, aunque ha mantenido una postura de espera ante un posible regreso de Trump a la presidencia, ha reiterado su llamado a una mayor asistencia federal para enfrentar la crisis migratoria que ha impactado severamente el presupuesto de la ciudad. Según Adams, Nueva York ha recibido cerca de 220,000 inmigrantes y solicitantes de asilo, lo que ha generado gastos millonarios que el gobierno federal no ha cubierto en su totalidad.

“Necesitamos apoyo real para abordar la crisis migratoria. Los recursos actuales no son suficientes para cubrir las necesidades de esta población, y las cuentas de la ciudad están al límite”, afirmó Adams en su conferencia semanal.

Contraste con líderes republicanos

Mientras el informe alerta sobre los riesgos de una administración liderada por Trump, líderes republicanos, como la congresista Nicole Malliotakis, aseguran que su regreso traería “mejores tiempos” para la economía y la seguridad pública en Nueva York. Malliotakis destacó recientes decisiones que, según ella, ya están beneficiando a la ciudad, como la suspensión de tarjetas de débito gratuitas para inmigrantes ilegales y el cierre de refugios que albergaban a personas vinculadas con actividades delictivas.

“Con Trump y los republicanos al mando, los neoyorquinos verán cómo las políticas comienzan a trabajar a su favor. Estamos encaminados hacia una recuperación económica y una mejora en la seguridad pública”, afirmó Malliotakis en una entrevista con Fox News.

Preparativos para los posibles impactos

El contralor Lander organizó una mesa redonda con líderes cívicos, empresariales y comunitarios para discutir estrategias de preparación ante las posibles políticas de Trump. Aunque el apoyo federal representa actualmente un 14% del presupuesto total de la ciudad, gracias a los fondos de alivio por la pandemia, una administración menos favorable podría generar un impacto devastador en servicios esenciales.

“Es crucial prepararnos para proteger a los neoyorquinos más vulnerables. La educación, la vivienda, la salud y el transporte público no deben ser sacrificados por políticas que no prioricen el bienestar de la población”, concluyó Lander.

Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com

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