miércoles 4 de diciembre de 2024 2:54 pm
Eddy Tolentino

El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la República Dominicana, en un esfuerzo por fortalecer las acciones para la preservación de los recursos naturales, anunció la firma de un acuerdo de cooperación con la Armada Dominicana. El objetivo principal de este acuerdo es garantizar la vigilancia constante del Monumento Natural Dunas de Las Calderas, un área protegida de vital importancia para la biodiversidad del país.

El acuerdo fue formalizado por el ministro de Medio Ambiente, Paíno Henríquez, y el comandante general de la Armada Dominicana, vicealmirante Agustín Alberto Morillo Rodríguez. Este acuerdo se da en el contexto de los esfuerzos por mitigar los daños causados a la zona el pasado 20 de noviembre, cuando se reportaron incidentes de tala y quema ilegal dentro del Monumento Natural, localizado en la comunidad de Quijá Quieta, en la provincia de Peravia, también conocida como Dunas de Baní.

Tras una investigación exhaustiva, las autoridades lograron identificar al presunto responsable de las acciones ilegales que afectaron esta área natural, lo que permitió la desvinculación del administrador del parque y la remisión del caso a la Procuraduría Especializada para la Defensa del Medio Ambiente y los Recursos Naturales.

Como parte de las medidas adoptadas para garantizar la protección de este valioso patrimonio natural, el acuerdo con la Armada incluye diversas acciones concretas. Entre ellas, el Ministerio de Medio Ambiente proporcionará cuatro motocicletas a la Armada Dominicana, lo que permitirá realizar patrullajes continuos y efectivos en la zona. Además, se instalarán tres nuevas torres de vigilancia de nueve metros de altura en puntos estratégicos del área protegida, junto con dos garitas de control para monitorear el tráfico de materiales producto de ilícitos ambientales. También se están construyendo un centro de visitantes y una estructura de boletería, así como una verja perimetral para delimitar el área.

El proceso de restauración de la zona afectada será supervisado por técnicos especializados de la Dirección de Bosques del Viceministerio de Recursos Forestales, quienes realizarán un estudio para determinar si el área requiere regeneración asistida o si es posible que la naturaleza recupere su estado sin intervención humana. Cabe destacar que, en el momento de la intervención, los tocones de los árboles no fueron removidos, lo que favorece la regeneración natural del ecosistema.

El ministro Paíno Henríquez expresó que con este acuerdo se eliminarán “los abusos y delitos ambientales”, y destacó la disciplina y el compromiso de la Armada Dominicana en la protección del medio ambiente. “Es fundamental que el Estado recupere zonas tan valiosas como las Dunas de Baní, y que se garantice el respeto a los 60 metros de pleamar que durante años han sido violados”, afirmó.

Por su parte, el vicealmirante Morillo Rodríguez reafirmó el compromiso de la Armada con la protección ambiental y garantizó su disposición para cumplir con la misión de vigilancia con la mayor eficiencia posible. “La Armada está presta para apoyar al Ministerio de Medio Ambiente en la protección de nuestros recursos naturales”, añadió.

El viceministro de Áreas Protegidas y Biodiversidad, Carlos Augusto Batista, explicó que la competencia de la Armada no se limita solo a la vigilancia, sino que también incluirá el combate contra los ilícitos ambientales provocados por actividades como la agricultura ilegal, la extracción no autorizada de minería no metálica y la ganadería, en particular la crianza ilegal de chivos en la zona. La proximidad de la base naval a la zona permitirá una vigilancia más efectiva y constante, asegurando así la protección de esta área natural tan importante para la biodiversidad de la región.

Con estas acciones, el Ministerio de Medio Ambiente reafirma su compromiso con la conservación del medio ambiente y los recursos naturales del país, al tiempo que hace un llamado a la ciudadanía a respetar las áreas protegidas y colaborar en su conservación. Este esfuerzo conjunto entre el gobierno y las instituciones involucradas busca garantizar un futuro más sostenible para las generaciones venideras.

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