El periodista de Associated Press fue raptado en 1985 en Líbano por un grupo de hombres armados cunado se disponía a jugar tenis con un compañero, y estuvo en cautiverio hasta 1991.
Terry Anderson, el periodista que fue secuestrado en Líbano en 1985 y estuvo en cautiverio durante más de seis años, murió en su casa en Greenwood Lake, Nueva York, a los 76 años. La noticia fue confirmada por su hija, Sulome Anderson.
“Lo vi hace una semana y mi pareja le preguntó si había algo pendiente en su lista de cosas que quisiera hacer. Respondió: ‘He vivido tanto y he hecho tanto. Estoy contento’”, dijo Sulome, quien destacó que su padre nunca se consideró a sí mismo como un héroe, pese a que muchos han insistido en denominarlo así.
Anderson, quien recientemente fue operado del corazón, fue corresponsal jefe de la agencia Associated Press en Oriente Medio, y llegó a la región para cubrir la invasión israelí de Líbano en 1982, luego de trabajar en Japón y Sudáfrica.
Anderson, que estuvo en cautiverio entre 1985 y 1991, narró su experiencia de secuestro a manos de milicianos de Hezbollah en su autobiografía “Den of Lions” (“Guarida de leones”), publicada en 1993.
Después de su regreso a los Estados Unidos, Anderson llevó una vida como orador y profesor de periodismo en varias universidades, incluyendo la Universidad de Florida, de la que se jubiló en 2015. Del mismo modo, regentó un bar, dos restaurantes y un rancho de caballos.
En el año 2000, Anderson demandó a Irán ante la justicia estadounidense por su secuestro, que dictaminó que el régimen iraní estaba involucrado. El periodista recibió una compensación millonaria de los activos iraníes congelados en Estados Unidos.
Julie Pace, vicepresidenta sénior y directora editorial de la Associated Press, expresó su aprecio por los sacrificios que Anderson y su familia hicieron como resultado de su trabajo.
“Terry estaba sumamente comprometido con el periodismo presencial sobre el terreno y demostró una enorme valentía y determinación, tanto en su periodismo como durante los años que permaneció cautivo”, apuntó.
Mediático secuestro de Anderson
Anderson fue secuestrado el 16 de marzo de 1985, cuando fue a jugar al tenis con un compañero fotógrafo de la agencia. Al dejar a su compañero en su casa, un grupo de hombres armados se acercó a Anderson y lo sacó de su vehículo para raptarlo.
Durante los casi siete años en los que fue rehén de Hezbollah, Anderson fue golpeado, encadenado a una pared, amenazado de muerte, encañonado en la cabeza con frecuencia y mantenido en confinamiento solitario durante largos periodos, de acuerdo con su libro.
La liberación de Anderson, así como de otros rehenes, se dio luego de una intensa negociación liderada por Giandomenico Picco, diplomático italiano de la ONU, que murió en marzo de este año. También la Iglesia de Inglaterra, al enviar a Terry White, que fue secuestrado en 1987 y fue liberado en 1991.
Con información de EFE