Kelly Andrade, una niñera colombiana de 27 años, ha sido otorgada una compensación de $2.78 millones de dólares tras ser grabada en video sin su consentimiento en el hogar donde trabajaba en Staten Island, Nueva York. La decisión del jurado se produjo tres años después de que Andrade presentara una demanda civil en el Tribunal Federal de Brooklyn contra Michael Esposito, el empleador responsable del incidente.
El jurado dictó $780,000 en daños por angustia emocional contra Esposito y su esposa, Danielle, además de $2 millones en daños punitivos contra Esposito, quien es empresario de restaurantes. Andrade fue contratada para cuidar a los cuatro hijos de la familia Esposito y le fue asignado un dormitorio privado en su residencia.
La joven descubrió la cámara oculta en un detector de humo en su habitación después de que se reubicara constantemente sobre su cama. La cámara contenía “cientos” de videos que la mostraban desnuda o con poca ropa. Andrade, aterrorizada ante la posibilidad de que su empleador estuviera armado, escapó por una ventana y luego denunció el incidente a la policía.
Andrade se quedó temporalmente sin hogar tras dejar la casa de los Esposito, y su abogado, Zachary Holzberg, señaló que su situación fue devastadora. La empresa “Cultural Care Au Pair”, que la había contratado, también fue demandada, aunque Andrade llegó a un acuerdo no revelado con ellos.
Esposito se declaró culpable de vigilancia ilegal y, tras un año de asesoramiento, pudo reducir su cargo a un delito menor, lo que le permitió evitar la cárcel. Actualmente se encuentra bajo libertad condicional por dos años.
Andrade, quien recibió cientos de horas de capacitación antes de venir a Estados Unidos a través de la agencia Cultural Care, fue colocada en la casa de Esposito, cuyo valor se estima en $800,000 dólares.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com
