El ataque por parte del ejército de Israel provocó la muerte de docenas de personas en su mayoría de niños y mujeres, confirmó el Ministerio de Salud.
El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, controlado por el movimiento terrorista palestino Hamás, indicó que al menos 90 personas fallecieron en un ataque israelí contra una zona humanitaria que buscaba eliminar al jefe militar del grupo islamista en el enclave, Mohamed Deif.
Según el ente, la mitad de los fallecidos son niños y mujeres, y el bombardeo dejó además 300 heridos, algunos en estado crítico.
El ataque sucedió en el área de Al Mawasi, al oeste de la ciudad de Jan Yunis, designada “zona humanitaria” por las fuerzas israelíes al comienzo de su operación en la localidad sureña de Rafah a principios de mayo.
Insistieron que era un complejo de Hamás
Los militares israelíes insistieron en que el lugar que atacaron era un complejo de Hamás donde se congregaban un gran número de milicianos y estaba ubicado en una zona abierta, rodeado de árboles y edificios, y no en las tiendas de campaña de Al Mawasi, donde residen miles de desplazados.
El ejército israelí dijo que el ataque contra Deif también tuvo como objetivo a Rafa Salama, comandante de la brigada de Hamás en Jan Yunis, y los describió como dos de los autores intelectuales del ataque del 7 de octubre contra el sur de Israel que desencadenó el conflicto en Gaza.
Por el momento no está claro si ambos líderes fueron alcanzados en el ataque, ni cuál es su estado.
Muere comandante
Israel confirmó el domingo 14 de julio, la muerte de Rafaa Salameh, comandante de la brigada de Jan Yunis del brazo armado de Hamás, en un ataque en Mawasi. Salameh era uno de los colaboradores más cercanos de Mohamed Deif, el ‘número dos’ del grupo en la Franja de Gaza y su jefe militar.
Por otro lado, la delegación de Israel agregó nuevas exigencias al acuerdo para alcanzar una tregua y hacer efectivo un intercambio de rehenes que complicará las negociaciones si los mediadores no intervienen, dijo a EFE una fuente palestina conocedora de las conversaciones.
Por Deutsche Welle
