jueves 19 de septiembre de 2024 6:21 pm

Los primeros modelos instalados en hospitales han sido un fiasco de grandes proporciones.

Nueva York es una de las ciudades más populares del mundo y es capaz de mostrarnos lo peor del ser humano, con uno de los peores accidentes de avión de la historia, y lo mejor de nuestra especie, pudiendo cursar estudios universitarios online en instituciones de dicha ciudad. Ahora, quiere abrazar a la IA, pero el tiro, nunca mejor dicho, ha salido por la culata.

El fiasco de los detectores de armas en Nueva York

Tal y como desvela el medio CBS News, la ciudad de Nueva York habría anunciado que incorporará a algunas estaciones de metro de la ciudad detectores de armas para mejorar la seguridad de los ciudadanos.

Sin embargo, éstos no parece que sean sinónimo de mayor seguridad, dado que algunos dispositivos que ya han sido probados con anterioridad dan muestra de que su tecnología no solamente no es útil, sino que arroja tal cantidad de falsos positivos que es imposible que pueda ser utilizada con certeza.

Según reporta el medio Hell Gate, los escáneres de la compañía Evolv instalados anteriormente en un hospital del histórico barrio del Bronx, en el año 2022, no habrían ofrecido resultados lo suficientemente positivos como para continuar expandiendo su uso por toda la ciudad.

Según los informes a los que ha tenido acceso el medio anteriormente mencionado, durante los 7 meses que estos detectores estuvieron en funcionamiento, de los 194.000 escáneres realizados, un total de 50.000 resultaron positivos. Sin embargo, lo más decepcionante del caso es que en el 85% de las ocasiones éstos fueron falsos positivos.

Únicamente 295 de los 50.000 positivos fueron realmente interceptaciones de diversos tipos de armas. La compañía Evolv asegura en su página web que ‘utiliza tecnología con sensores avanzados e inteligencia artificial para distinguir entre armas y objetos cotidianos’.

A juzgar por la información recopilada por medios de comunicación estadounidenses, no parece que dicha tecnología haya sido probada a conciencia en la fase preliminar de estudio y mucho menos que haya sido controlada posteriormente durante los meses que ésta ha estado intentando salvaguardar la seguridad del hospital del Bronx.

De hecho, la compañía ya se enfrenta a una demanda colectiva promovida por los accionistas de Evolv, quienes aseguran que su tecnología de escáner es mucho menos efectiva de lo que se había anunciado.

Por Roberto Cantero

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