Canadá busca redefinir el comercio norteamericano: Ontario y Alberta apuestan por un tratado exclusivo con EE.UU.
Los primeros ministros de Ontario, Doug Ford, y Alberta, Danielle Smith, han intensificado su propuesta para rediseñar las relaciones comerciales de Canadá, impulsando la creación de un acuerdo exclusivo con Estados Unidos que excluya a México del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Según argumentan, los vínculos comerciales de México con China están afectando la economía canadiense y estadounidense.
El contexto de la propuesta
Doug Ford, quien lidera la provincia más poblada de Canadá, expresó su posición a través de redes sociales luego de mantener conversaciones con sus colegas provinciales y territoriales. En su publicación, destacó la necesidad de un enfoque nacional que priorice un acuerdo comercial bilateral con EE.UU., resaltando que este país es el principal socio económico y aliado estratégico de Canadá.
“El próximo paso debe ser fortalecer nuestros lazos comerciales con Estados Unidos y proteger los intereses de nuestros trabajadores”, afirmó Ford, quien también preside el Consejo de la Federación de Primeros Ministros.
El T-MEC, sucesor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), entró en vigor en 2020 con la intención de modernizar las relaciones económicas entre los tres países. No obstante, Ford y Smith consideran que el acuerdo actual beneficia injustamente a México, especialmente en sectores clave como el automotriz, donde acusan a México de introducir piezas y productos provenientes de China, debilitando a los trabajadores norteamericanos.
Acusaciones contra México
Ford ha señalado que México se ha convertido en una “puerta trasera” para la entrada de productos chinos al mercado norteamericano. Según el líder provincial, esto afecta negativamente tanto a Canadá como a Estados Unidos, poniendo en riesgo empleos y oportunidades de crecimiento económico en ambos países.
Por su parte, Danielle Smith, primera ministra de Alberta, respaldó plenamente las declaraciones de Ford y reiteró la necesidad de fortalecer las alianzas directas entre Canadá y Estados Unidos. “México permite la entrada de inversiones chinas que perjudican nuestra seguridad económica y energética. Canadá debe priorizar acuerdos que realmente beneficien a nuestra gente”, afirmó Smith.
Debate y reunión clave en diciembre
Para avanzar en este objetivo, los líderes provinciales de Canadá se reunirán en Toronto los días 15 y 16 de diciembre. En este encuentro se discutirá cómo proceder con la exclusión de México del T-MEC y los pasos necesarios para negociar un acuerdo bilateral con EE.UU.
Además, Ford y Smith han instado al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, a abordar este tema con prioridad en sus negociaciones comerciales. Según los mandatarios provinciales, es fundamental que Trudeau inicie conversaciones con el posible próximo gobierno de Donald Trump, anticipándose a la política proteccionista que el expresidente podría implementar si regresa al poder.
Impacto en la región y posibles consecuencias
La propuesta de excluir a México del T-MEC podría desatar tensiones comerciales significativas en América del Norte. Hasta ahora, el acuerdo ha sido considerado un pilar de la estabilidad económica regional, promoviendo la integración de las tres economías.
Sin embargo, Ford y Smith argumentan que un enfoque bilateral entre Canadá y EE.UU. fortalecería la relación entre ambos países y protegería sus intereses frente a prácticas comerciales que consideran desleales.
Por otro lado, esta iniciativa podría afectar gravemente a México, que ha sido uno de los principales beneficiarios del T-MEC. La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, recientemente elogió los logros del tratado en la Cumbre del G20, subrayando su importancia para el desarrollo económico y la cooperación trilateral.
Un futuro incierto para el T-MEC
Mientras Ford y Smith continúan su campaña para redefinir el comercio norteamericano, el destino del T-MEC pende de un hilo. Con tensiones crecientes entre los tres países, el próximo año podría ser decisivo para determinar si América del Norte mantiene su modelo de integración económica o si se desfragmenta en acuerdos bilaterales.
La propuesta ha generado un intenso debate sobre los beneficios y desafíos de modificar un tratado que ha sido fundamental para el comercio regional. A medida que se acercan las reuniones en diciembre, queda por ver cómo reaccionará el gobierno federal canadiense y qué implicaciones tendrá esta iniciativa para las relaciones con México y Estados Unidos.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com.