sábado 23 de noviembre de 2024 9:02 am
Eddy Tolentino

Familiares de Marileidy Paulino recibieron la vivienda remodelada con el dinero del empresario Antonio Carbone, una oferta que ella previamente había rechazado.

La controvertida vivienda ofrecida por el empresario Antonio Carbone a Marileidy Paulino como reconocimiento por su victoria en los Juegos Olímpicos de París, la cual fue declinada por la atleta, terminó en manos de dos de sus hermanos y una sobrina, según explican los familiares de la famosa velocista dominicana.

Tras su triunfo en los Juegos Olímpicos de París en agosto pasado, Marileidy Paulino recibió una lluvia de aplausos, regalos y otras recompensas que suelen acompañar el éxito.

Uno de estos obsequios fue la vivienda ofrecida por Carbone, pero Paulino la rechazó con estas palabras: “Ayer, mi equipo de trabajo le comunicó personalmente a su representante que declinaba en su totalidad dicha donación, y le invito a donar lo ofrecido a mi persona a cualquier institución sin fines de lucro de nuestro país.”

Su equipo de prensa cerró el tema afirmando que la atleta quería enfocarse en sus próximas competencias.

A pesar de la negativa, el empresario continuó con el proyecto, y la vivienda fue construida en el barrio Salomé Ureña, casa #100, en el mismo terreno donde sus hermanos vivían en dos humildes estructuras con muchas precariedades.

Una tía de Marileidy, Xiomara Paulino, quien vive en la casa contigua a la que Carbone ofreció a la atleta, explicó que actualmente la ocupan dos de los hermanos de Marileidy. “Esta fue la casa que le ofrecieron a Marileidy, pero ella no la aceptó. De hecho, ni siquiera ha venido por aquí todavía,” comentó Xiomara Paulino.

La atleta, quien recientemente ganó otra competencia de 400 metros, se ha mantenido invicta en la Liga Diamante esta temporada.

Sentada en la galería de su casa, la tía explicó que en la vivienda ahora habitan sus hermanos, uno de los cuales es plomero y el otro trabaja conchando en una motocicleta. Dos vecinos corroboraron la información, añadiendo que, aunque la casa no es tan impresionante como algunos creen, es un gran cambio para quienes no tenían nada.

La vivienda fue entregada a los parientes de Marileidy completamente amueblada, aunque no fue posible acceder al interior ya que ninguno de los ocupantes estaba presente en ese momento. Según los vecinos, los hermanos de la atleta estaban trabajando en la filmación de un documental sobre ella.

En cuanto a la madre de Marileidy, Anatalia Paulino, tampoco estaba en su hogar al momento de la visita de los reporteros. Anatalia, quien antes vivía en una casa alquilada, ahora reside en una vivienda construida por Marileidy en el barrio La Picúa, también en Don Gregorio.

Cuando se les preguntó a los familiares si esa era la casa que el gobierno había prometido a Marileidy tras su medalla de plata en Tokio, respondieron enfáticamente: “No, esta casa la construyó Marileidy con su propio dinero.”

También explicaron que el gobierno había prometido construir una casa en un terreno baldío frente a la vivienda actual, pero hasta la fecha no se ha hecho nada.

Respecto al padre biológico de Marileidy, aclararon que vive en Palenque y que la atleta no ha tenido contacto con él en mucho tiempo, mientras que su padrastro es agricultor.

La vivienda que no fue aceptada por Marileidy ha generado interés en medios nacionales debido a su llamativa fachada, la cual, según miembros de la Sociedad de Arquitectos de Baní, es considerada como “puro kitsch,” es decir, una imitación de algo grandioso que resulta en una construcción de mal gusto.

Aunque a simple vista parece ser una edificación de dos plantas con un estilo neoclásico, los expertos la describen como un ejemplo de “fachada falsa.”

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