El presidente Luis Abinader exigió a su gabinete firmar un pacto de ética y transparencia.
Durante el primer consejo de gobierno, el pasado 23 de agosto, el presidente Abinader asignó esta tarea y designó al ministro de la Presidencia, José Ignacio Paliza, para comunicar a todos los altos funcionarios la obligatoriedad de suscribir el documento.
Este compromiso está basado en la transparencia, la buena administración y la lucha contra la corrupción. Un total de 100 funcionarios, incluyendo al presidente y la vicepresidenta, firmaron el acuerdo ante la Dirección General de Ética Gubernamental.
El documento subraya el respeto a las leyes, la integridad, la ética, la transparencia, la imparcialidad y la eficiencia. También exige prevenir la corrupción, cumpliendo con los Oficiales de Cumplimiento de Compras Públicas y las Comisiones de Integridad Gubernamental, además de proteger a los denunciantes y testigos de actos contrarios a la ética.
El pacto establece que los funcionarios deben cumplir obligatoriamente con sus declaraciones juradas de bienes, como lo estipula la ley 200-04 sobre Libre Acceso a la Información Pública. Además, promueve el buen trato al personal y la continua renovación de sus capacidades y ética profesional.
Otro aspecto clave es anteponer el interés general sobre los intereses personales, partidistas o familiares, evitando conflictos y luchando firmemente contra la corrupción administrativa. Los firmantes se comprometen a informar a las autoridades sobre cualquier acto que afecte los recursos del Estado.
El documento establece claramente que los funcionarios que violen estos compromisos éticos estarán sujetos a sanciones. Asimismo, enfatiza la importancia de rechazar sobornos, comisiones o porcentajes que afecten la calidad de los contratos y los servicios brindados a los ciudadanos.
