Trump, bajo escrutinio: fijada lectura de sentencia antes de su regreso al poder
El juez de Nueva York, Juan Merchan, anunció que la lectura de sentencia para el expresidente Donald Trump, condenado por un caso de encubrimiento de pagos ilícitos, se realizará el próximo 10 de enero, apenas diez días antes de que asuma nuevamente como presidente de los Estados Unidos. Este evento marca un hecho sin precedentes en la historia del país: un mandatario condenado penalmente que regresa al Despacho Oval.
Detalles del caso y postura judicial
Trump fue hallado culpable en mayo por 34 cargos de falsificación de registros comerciales relacionados con un pago a Stormy Daniels, exestrella porno, para silenciar un supuesto encuentro íntimo antes de las elecciones de 2016. Aunque el caso no implica una sentencia de prisión, el magistrado Merchan destacó que el expresidente podría recibir libertad sin condiciones en lugar de encarcelamiento.
En su decisión, Merchan señaló que, si bien los argumentos de la defensa apelaban a la inmunidad presidencial según un fallo de la Corte Suprema, el tribunal encontró justificación suficiente para proceder con la sentencia. Sin embargo, una vez que Trump asuma la presidencia, es probable que recupere inmunidad judicial, lo que podría afectar el desenlace del caso.
Reacciones de la defensa
Steven Cheung, portavoz de Trump, calificó la decisión como “una violación flagrante de la inmunidad presidencial”. Según Cheung, el caso debería ser desestimado inmediatamente, ya que interfiere con las responsabilidades fundamentales de la transición presidencial.
La defensa de Trump también sugirió que la sentencia busca obstaculizar su capacidad para liderar eficazmente desde la Casa Blanca. “Trump continuará luchando contra estas acusaciones hasta que todas sean desestimadas”, afirmó Cheung en un comunicado.
Impacto político y futuro
La condena no impide que Trump ejerza sus funciones como presidente. Sin embargo, su regreso al poder como un mandatario convicto podría tener implicaciones significativas tanto en la política interna como en la percepción internacional de su administración. Este caso se suma a otros enfrentamientos legales que el expresidente ha tenido que sortear, incluyendo investigaciones federales por documentos clasificados y presunta conspiración para anular los resultados de las elecciones de 2020.
A pesar de los múltiples procesos legales, el apoyo de su base sigue siendo sólido, lo que refuerza su posición como figura central en el panorama político estadounidense.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com
