La nueva gran batalla de Rosa Jiménez, cuyo caso por la muerte de Bryan Gutiérrez, de 21 meses, fue cerrado definitivamente esta semana, es por su salud.

La niñera mexicana acusada erróneamente de matar al menor al que cuidaba y quien cumplió injustamente 18 años encarcelada necesita un trasplante de riñón para batallar contra una condición renal.

Rosa Jiménez había sido condenada, en el 2005, a 99 años de prisión por la muerte de Bryan Gutiérrez, de 21 meses, quien estaba bajo su cuidado en Austin, Texas.

Este lunes, la Fiscalía de Travis cerró completamente el caso al presentar una moción para desestimar los cargos contra la hispana por los hechos reportados en el 2003.

El Proyecto Inocencia (Innocent Project) fue la entidad que logró que se reabriera el caso tras años de pedidos para que la Fiscalía de Travis revisara las alegaciones.

La jornada judicial para hacerle justicia a Jiménez tuvo su punto culminante en el 2021 cuando varios expertos pediátricos indicaron en una audiencia que exámenes concluyeron que la muerte del bebé había sido un accidente.

La mujer fue liberada bajo fianza ese año luego de que una jueza determinara que era inocente.

En mayo del 2022, la Corte de Apelaciones en lo Penal de Texas anuló la condena. El tribunal estableció que la Fiscalía había utilizado testimonios falsos y engañosos para lograr la condena.

El pequeño Bryan murió ahogado con papel toalla. El menor sufrió una lesión cerebral grave debido a la falta de oxígeno y falleció tres meses después del incidente.

En el juicio que se tradujo en la convicción de la mexicana, uno de los testigos de la fiscalía afirmó que era físicamente imposible que el niño se hubiera atragantado accidentalmente y que fue Jiménez quien le introdujo las toallas de papel en la boca.

La nueva batalla de Rosa Jiménez

Meses después de su liberación en 2021, Jiménez comenzó a recibir diálisis. La mujer sufre desde el 2013 de enfermedad del riñón que actualmente se encuentra en etapa cuatro o terminal.

Actualmente, requiere de un trasplante de riñón que le haga menos complicado retomar su vida en libertad.

En un mensaje en la página de National Kidney Registry, Jiménez pide la ayuda ciudadana para lograr la meta.

“Además de combatir esta enfermedad, yo pasé mis últimos 20 años luchando por mi libertad luego de ser erróneamente convicto al principio de los 20 años. Yo pasé 18 años en prisión por un crimen que nunca ocurrió. Sin embargo, enfrento mi próxima gran batalla: la lucha por mi vida. Ahora que soy completamente libre y a punto de ser abuela, yo solo quiero estar saludable para ser parte de la vida de mi nieto y comenzar a reconstruir mi propia vida”, lee el mensaje de la hispana en el sitio web.

eldiariony.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *