
La comunidad de Los Brazos, en Jamao al Norte, provincia Espaillat, está de luto tras el fallecimiento de Sorángel Peña, quien no pudo superar el dolor de perder a sus dos hijos, Leovanny y Giguendon Peña Rojas. Los jóvenes fueron asesinados en mayo de 2024 en una lavandería en el condado de Chester, Pensilvania, Estados Unidos.
Sorángel, de 56 años, nunca encontró paz tras la tragedia. «Ella después que mataron a sus hijos jamás tuvo paz», dijo su prima Rossi Peña a Listín Diario. La pérdida de sus hijos, quienes eran su mayor alegría, la sumió en una profunda tristeza que afectó gravemente su salud.
Diez meses después de la tragedia, Sorángel falleció, dejando un vacío en su comunidad. Sus restos fueron velados en la casa que sus hijos construyeron para ella, y su nicho fue construido junto a los de sus hijos en el cementerio local. El alcalde Jairo Morillo expresó su pesar y destacó el impacto de la pérdida en la comunidad.